La exfoliación natural, es un tratamiento estético que ha evolucionado con el pasar del tiempo, ésta consiste en eliminar las células muertas generadas principalmente por los rayos solares, mala alimentación, restos de maquillajes e incluso por toxinas que están en el ambiente.
Las células muertas impiden que la piel se regenere con normalidad (cada 28 días), aunque con el pasar del tiempo esta regeneración se vuelve lenta, por lo tanto tenemos que ayudar al cuerpo con dicho proceso, para lograr obtener una piel limpia y joven.
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Contentidos
Exfoliación natural y tipo de piel:
Si la piel es grasa debemos hacer una exfoliación de 2 o 3 veces por semana, si la piel es seca se debe hacer solo una exfoliación semanal, ya que la piel puede sensibilizarse ocasionando que se irrite.
¿Cómo hacer un exfoliante natural?
Con el paso de los años se han usado muchos productos para poder exfoliar la piel pero los ingredientes naturales mas efectivos para crear un exfoliante son: aceites (coco, oliva, origen animal, argán o almendras preferiblemente) y materiales granulosos (azúcar, sal marina o polvo de alabastro que es un tipo de piedra), se mezclan y se procede a aplicar, frotando sobre la piel.
7 pasos a seguir para exfoliar la piel del rostro
1: Lavar muy bien el rostro para eliminar residuos de maquillaje, toxinas que se encuentran en el ambiente, y las células muertas que a diario están en nuestro rostro impidiendo la creación de nuevas células.
2: colocarse en el rostro un paño húmedo con agua tibia durante 1 minuto, (el agua tibia ayuda a abrir los poros ocasionando un mayor efecto)
3: Aplicar la mezcla en el rostro con movimientos circulares durante 1 minuto pero no aplicando mucha fuerza (Los movimientos preferiblemente deben ser desde abajo hacia arriba, desde el mentón hacia la frente, lo que ocasiona que la piel se mantenga más joven y firme).
4: dejar actuar por 5 o 10 minutos, dependiendo del efecto que se desee obtener.
5: lavar el rostro con abundante agua, eliminando residuos de la mezcla.
6: aplicar crema hidratante para proteger la piel.
7: secar el rostro con un paño suave, haciendo pequeños toques por toda la piel.
Es necesario tener en cuenta que los resultados de este método no se verán inmediatamente, es la perseverancia y la consistencia lo que nos llevara a tener un resultado positivo.
¡Manos a la obra!
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